Valle del Saja - Valle del Nansa

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Hoy ha sido otra de esas mañanas en las que disponía de cierto tiempo libre, y en vista de que en una semana no iba a poder coger la moto mas que para ir a trabajar, me he ido a dar una vuelta.

Esta, al igual que casi todas, ha sido sin rumbo fijo, es mas, durante el camino he ido calculando tiempos y distancias, ya que a la una del mediodía, debía estar en casa de regreso.

A las diez menos cuarto, ya estaba preparado y con la moto en marcha. 

Salimos de Pontejos, y he enfilado por la autovía direccion Torrelavega. En un principio la idea era ir hasta Panes, Cangas de Onís y vover por Llanes, pero iba a tener que correr, y a parte de que no me apetece, no me gusta correr. Después pensé subir por Palombera y luego tirar para la estación de esquí de Alto Campoo. Pues nada eso haremos. 

Tiro por autovía hasta Cabezón de la Sal, localidad esta famosa por varias razones. Aquí se celebra el día de Cantabria, ferias de ganado y hay muchos artesanos del mueble.

Aquí cojo rumbo hacia Palombera, carretera que transcurre por el valle de Cabuérniga, a orillas del rio Saja.

Este es cartel que nos encontramos de estado de los puertos de camino, y otro que nos advierte que pasamos cerca de una reserva natural

La primera parada es en Ruente, para repostar, y hacer una visita a la Fuentona:

Sin detenerme mas, continúo camino, y antes de llegar a Sopeña, me detengo a ver como baja el Saja a estas alturas del año. Llevamos un verano que apenas ha llovido, y hoy a catorce de octubre, han caido cuatro gotas. En enero, esto es otra cosa, buena fe de ello la da la anchura del cauce.

Indicar que Sopeña, es el lugar de nacimiento del escritor montañes Manuel Llano, y que merece la pena darse un paseo por el pueblo.

Continúo, ya que queda mucho camino por delante, y al llegar a Valle dejo a la derecha la carretera que lleva a Carmona por el Collado de Carmona, y sigo hacia Palombera, pero cambio de opinión, y media vuelta. Palombera ya lo he hecho varias veces, y aunque es un puerto precioso que transcurre por un bosque de abedules, robles y castaños, tiro por el collado hacia Carmona.

El puerto es una chulada, y no me cruzo mas que un par de coches en todo su recorrido, carretera en buen estado y no mas de cien metros seguidos en línea recta.

Al coronar me detengo y saco un par de fotos, todo lo buenas que mi camara  samsung me permite. 

Monolito indicando altitud y nombre, y vacas Tudancas autóctonas de la zona, aclimatadas al rigor de los inviernos de la zona.

Tiro para abajo con ciudadito, ya que a pesar de que luzca el sol, hay zonas que no reciben rayos a ninguna hora del día, y sumado a las heladas que caen por la noche, te puedes encontrar zonas húmedas y resbaladizas.

Un poquito mas abajo me detengo en un mirador y ya podemos ver Carmona, con los picos de Europa al fondo

Bajamos durante cinco minutos mas y ya hemos llegado, aquí haremos paradita de café y paseo.

Este pueblo, y segun los oyentes de Radio Altamira, es el mas bonito de toda Cantabria

La verdad es que es precioso, casas agrupadas en cuesta, la mayoría de ellas con su pajar y cuadra.

También de aquí son famosas sus albarcas, especie de zapato de madera con tres o cuatro tacos, las cuales de llevan con las zapatillas dentro, ya os podéis imaginar lo confortables que son.

Incluso nos encontramos un monumento a un famoso artesano, un tal Amador:

Construcciones tipicas:

Muchas de ellas, tienen un porche, donde almacenan la leña, y tienen su taller de albarcas, es decir, un banco, o silla, o en este caso sillon, y tronco de madera sobre el que trabajar

 Un poco mas alante, me encuentro con este sencilo espositor, al cual nada mas acercarme, sale el dependiente...

Todas la piezas son artesanales, y estan hechas a partir de una solo trozo de madera. Le pregunto si tiene rastrillos de madera para niños, y me dice que a parte de que no estan pagados por el tiempo que lleva hacerlos, siempre le vuelve algún cliente reclamando servicio técnico porque se le ha roto alguna púa, y ahí deja de ser rentable del todo, por lo que dice que ya no los hace.

Sigo de paseo, y me encuentro otro artesano en plena faena, el cual me ofrece sus productos, lo mismo que el anterior, cucharas y demás utensilios, pero yo quiero un rastrillo. Me dice que si los hace, pero que a partir de marzo...no se el porqué...aqui le dejo con sus quehaceres...

Un poco mas alante, encuentro un hombre picando el dalle, es decir, afilándole. Hace tiempo, era de lo mas normal, ver a la gente afilarlo de esta manera, que no es mas que hacerle filo a base de golpes de martillo y pasarle la pizarra

...y hasta aquí ha llegado mi visita a Carmona, por lo que me despido y arranco hacia Puentenansa, y siguiendo el curso del rio Nansa llego a Pesués, y su ría de Tina Menor

De aquí a San Vicente de la Barquera, foto en el mirador, y camino para casa por autovía, que ya va siendo hora.

Pues ésto ha dado de si la mañana.

Saludos

Gonzalo